Sèraphine "Martin Provost"

Narra la vida, fuera de lo común, de la francesa Séraphine de Senlis, una mujer nacida en 1864 que fue pastora, luego ama de casa y, finalmente, pintora antes de hundirse en la locura. Comienzos de siglo XX. Séraphine Louis, de 42 años, vive en Senlis y se gana la vida limpiando casas. El poco tiempo que le sobra lo ocupa pintando. Es la mujer de la limpieza de la Sra. Duphot, que alquila un piso a Wilhelm Uhde, un marchante alemán fascinado por los pintores modernos e ingenuos. Durante una cena ofrecida por la Sra. Duphot, Wilhelm Uhde descubre un pequeño cuadro que había traído Séraphine unos días antes. Fascinado, lo compra y convence a Séraphine para que le enseñe otras obras suyas. (FILMAFFINITY)

Ví está película en un cine de la Plaza de España porque tenía que hacer un trabajo de Arte para el colegio, y tenía que pintar algo abstracto relacionado con la primavera, pero después de hacer muchos bocetos y después romperlos (niguno me convencía) decidí ver la peli haber si me inspiraba, y no se si fue la peli la que lo hizo, pero al final me pusieron un 10. jajaja

Ésta película biográfica de Seraphine Louis está muy bien interpretada por Yolande Moreau que lo hace estupendamente, y además se parece a la auténtica. :P
También la fotografía es una maravilla a manos de Laurent Brunet, y le suma muchos puntos, haciendo que sea una parte muy importante de la pelicula y muy bonita. Cada fotograma es una preciosa obra de arte.
Hay que destacar también las secuencias en exteriores y su banda sonora. Todos los actores están magníficos.

Se expone muy bien la personalidad de ésta introvertida y humilde aldeana, descubierta en su talento por un negociante alemán de la compra y venta de cuadros, y también la de este marchante, quién sin lugar a dudas ganó mucho dinero a costa de la pobre mujer.

Con perfección, Martin Provost nos muestra la vida y obra de esta excéntrica pintora, que acabó sus días en un sanatorio mental en la más absoluta pobreza.

Me gusta mucho el ritmo de la película, esas imágenes con música en las que se muestra a Seraphine pasando sus horas sola y en silencio, pintando, con sus manos desgastadas, agrietadas, firmes, unas manos que han sido utilizadas durante toda una vida de trabajo con la que seguir adelante. Y esa sutileza, cuidado  y sencillez a la hora de ponerse a pintar..Es una maravilla.
También me encantó el momento en el que el marchante alemán Wilhelm Uhde (Ulrich Tukur) le dice a Seraphine: “Pasarse la vida fregando cuando tiene oro en las manos” —por su pintura siendo casi una analfabeta— y observamos a partir de ahí, el proceso de conciencia de su talento.

Su mirada es sincera, sincera locura que traspasa la pantalla para llegar a lo más adentro del espectador. Su tristeza en los momentos más duros hiere, y deseas que en un mundo de racionalidad y "buen gusto", Séraphine sea libre para alegrar las almas de los que aman el arte. La belleza de la locura.

Nada tiene que ver con la película sobre Vermeer llamada "La jóven de la Perla", con la que se le compara a ésta, que también muestra la vida de ése pintor, pero de una manera poco creible, y sólo trata de convencer al espectador de lo bueno que era él pintando. 

Conforme la película va llegando a su fin y ella entra cada vez más en su estado de locura ese cariño que sientes hacia el personaje se va convirtiendo en pena y compasión.
En fin, una bonita peli 7/10

TRAILER:


 BIOGRAFÍA:


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